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EXPERIENCIAS
“Independientemente de lo que estudies, estudiar
fuera del país es ya una experiencia en sí. Llegar a
Madrid con una maleta en la mano y una mochila
en la espalda, sin conocer a nadie y 6 horas de
atraso en el reloj, a buscarte la vida en un lugar
totalmente desconocido, es todo un desafío. Ya en
Cádiz, a 4 horas en tren desde Madrid, la travesía
continúa: buscarte un piso, acomodar el español a
uno más neutro para que te entiendan y empezar
a absorber rápidamente la forma de ser del
andaluz para adaptarte a una idiosincrasia que
desconoces, no es tarea fácil”.
Recalcó también que si a todo esto se le suman las
posibilidades que entrega la Unión Europea (UE) a
sus ciudadanos, queda muy claro el por qué de la
existencia de ciudades cosmopolitas con un
tránsito profuso de idiomas y nacionalidades. “La
experiencia es doblemente enriquecedora por la
diversidad cultural en la que desarrollas tu
cotidianidad. Un ejemplo de ello es que cada
cuatro meses los ocupantes de los pisos
(departamentos) se renuevan y es así como he
llegado a compartir departamento con chicos y
chicas de España, Finlandia y Rusia”.
PROYECCIONES
“Quisiera desarrollar una consultora que funda la
investigación con el diseño. Particularmente me
interesan el estudio del patrimonio intangible (las
fiestas urbanas y religiosas, específicamente) y el
espacio público. Antes de irme a España estaba
también trabajando como profesora ayudante de
taller de cuarto año y la experiencia fue valiosa y
gratificante, me gustaría continuar paralelamente
esa senda, por lo que también está entre mis
planes estudiar algún máster relacionado con la
docencia universitaria”.
En cuanto a los proyectos que está desarrollando,
sostuvo que existen dos propuestas de
colaboración entre la UCA y la UNAP y una tercera
de aplicación general a las universidades chilenas,
que serán presentadas a la encargada de
internacionalización de la UCA, en un mes más.
FAMILIA
En el mes de octubre Gissel retornará a la Tierra de
Campeones y se reencontrará con los suyos,
especialmente su madre. “Somos seis: mis padres,
yo soy la mayor, dos hermanos y una hermana
pequeñita de 12 años recién cumplidos, además de
dos sobrinas. Pero cuando me preguntas por mi
familia, pienso inmediatamente en mi madre,
referente de mis decisiones más atrevidas. Ella
adora a los niños y antes de casarse estudió para
ser Técnica de Párvulos, trabajó en eso casi toda su
vida. Después de criarnos retomó los estudios en la
Unap y se tituló a los 50 años de Educadora de
Párvulos, hoy es maestra preescolar en un colegio
de Alto Hospicio. Ella me inspira, porque mi madre
es por sobre todo, atreverse.
Si bien sostiene que ha pasado los últimos años
poco tiempo con sus seres queridos, afirma que “la
verdad, es que la nostalgia nunca ha sido muy
compañera de mis aventuras. Pienso mucho en mi
familia, sobre todo en mis sobrinas, pero en forma
alegre, con ganas de contarles las cosas que he
conocido, e impulsarlas a que se atrevan a viajar y
conocer. No puedo imaginar mejor patrimonio
personal que las experiencias que hasta ahora he
tenido y tendré”.
EX ALUMNA UNAP