Académico mexicano instruyó seminario de Educación Parvularia Intercultural en la UNAP
Con la participación del director de Conadi, Isidro Mamani; el académico y antropólogo especializado en arte, Roberto Ramírez, de la Universidad Autónoma de Puebla, México; e invitados de honor -lugareños y hablantes de lengua nativa- se desarrolló ayer el Seminario Prácticas Pedagógicas Interculturales de la Educación Parvularia en la Región de Tarapacá, organizado por la directora de la carrera de Educación Parvularia de la Universidad Arturo Prat (UNAP), Verónica Apablaza (a la izquierda, en la imagen); y apoyada por la académica Marcela Quintana de la Facultad de Ciencias Humanas de esta casa de estudios.
Según recordó Mamani, "la Conadi tiene un convenio con la UNAP para ejecutar un programa de perfeccionamiento de educadores tradicionales en lengua y cultura aymara. En ese marco participamos, financiamos el programa. El objetivo es que se entregue a los educadores la metodología del trabajo en aula para trabajar con los chicos. Conocen la cultura, saben la lengua, pero para cumplir las normas curriculares se requiere que haya una formalidad, que les entrega la universidad".
Apablaza, en tanto, sostuvo que "los educadores interculturales son tremendamente valorados, porque entregan valores propios de la cultura y son muy necesarios en sus valores, como la serenidad, la reciprocidad, la trascendencia, y que están ausentes en una sociedad que corre y corre. Permiten que nuestra identidad mejore y la autoestima mejora".
En ese sentido, añadió, asistieron al encuentro educadoras de párvulos de Junji, de Integra, de Mineduc, estudiantes de educación parvularia intercultural, y tradicional, e invitados de honor, como lugareños y hablantes de lengua nativa.
CAPACITACIÓN
La directiva apuntó que el objetivo del seminario se enmarca en un proceso de capacitación de educadores naturales propio de la cultura y los hemos estado apoyando en estrategias didácticas para atender a los párvulos.
-Hoy trabajamos con estudiantes y educadoras de Iquique y Arica, y al mismo tiempo aprendemos de los educadores naturales. Contamos con un especialista de México en danzas propias de la cultura. La corporalidad nos sirve para estar siempre cerca de aquello que es entretenido, de forma lúdica, para captar la motivación de los niños-, resaltó Apablaza.
ARTE Y
FORMACIÓN
En efecto, el frontis del Salón Oscar Hann congregó a las cerca de 60 asistentes, quienes calentaron los ánimos antes de ingresar al auditorio, con una clase de danza tradicional de tintes mexicanos, liderada por Ramírez.
Como antropólogo social, magíster en Etnohistoria y en Estética del Arte, y académico de la Facultad de Filosofía y Educación de la Universidad Autónoma de Puebla, México, el invitado expresó: "Vemos cómo el arte puede ser un vehículo de enseñanza. Hemos trabajado en el arte tradicional como un medio de desarrollo de la identidad y de respeto al otro. Una crítica a los sistemas educativos es que muchas veces desaprovecha este tipo de oportunidades y privilegia el desarrollo de las ciencias únicamente, se olvida del desarrollo integral de los humanos, lo que redunda en jóvenes con carencia de identidad y valores en el espíritu y el cuerpo. Es un círculo vicioso que, si nos aplicamos en las artes, puede ser un círculo virtuoso".