Una ceremonia solemne celebró la Dirección de Armonización Curricular e Innovación Docente (DACID) el pasado 6 de abril, en el Hall de la Facultad de Ingeniería y Arquitectura de la Universidad Arturo Prat (UNAP), con la entrega de constancias de participación a 27 asistentes al I Diplomado de "Planificación y Gestión Curricular".

El acto lo presidió la Directora del DACID, Sylvia Zamorano, quien comentó junto a Beatriz Cortés Díaz, Encargada de la Unidad de Innovación Docente,  que "el Diplomado tiene como caracterización una bajada del Modelo Educativo Institucional (MEI); son cinco módulos, partiendo por Publicación, las competencias genéricas y las metodologías geoparticipativas, y retomamos la planificación en sí, el aula, evaluación y taller de publicación".

Añadió que "el DACID contempla áreas de Diseño Curricular y el Área de Innovación Docente; el diplomado cabe en esta última área. Vinieron relatores internacionales, como la Dra. Hamodi, y nacionales; en Publicación, participó Iván Valenzuela".

Zamorano destacó además que "de los 23 artículos hay seis que fueron ingresados en revistas indexadas, en áreas de metodologías geoparticipativas, evaluación y resultados de aprendizaje, que se dieron en las aulas. Ahora presentaremos una revista digital con las publicaciones, y se distribuirá en centros y sedes. Estamos contentos".

BALANCE

La Camerata EMAC - UNAP dio realce a la ceremonia de entrega de diplomas.

Ximena Ibarra, Vicerrectora Académica, enfatizó en la oportunidad la importancia de entregar a los docentes y profesionales herramientas que les permitan competir en la educación superior nacional. "Estamos trabajando en un proceso de acreditación institucional. Todos somos agentes de cambio, y en eso los quiero comprometer a que nos ayuden en esta misión", precisó.

Raúl Araya, Académico de la carrera de Kinesiología, ejemplificó además la experiencia del "Aprendizaje de servicio" en el Jardín Purum Naira, que depende de la UNAP, señalando que "la relación es bastante colaborativa con las tías".

Álvaro Oyarzún, Académico de la Facultad de Ciencias Empresariales, indicó finalmente que entró al diplomado con una suerte de escepticismo, "pero ví la luz y a medida que iban pasando los módulos, vimos que una clase presencial podía ser muy buena. Necesitamos publicar, damos forma a nuestro artículo, y no es tan difícil".