Nelson Castro Méndez, Académico de Psicología en UNAP Sede Victoria: teletrabajo o trabajar desde casa, ¿cómo hacerlo?

Ante los difíciles días que enfrentamos como sociedad y que nos ponen a prueba, nos surge la pregunta, ¿qué tan capaces seremos de superar la pandemia del Coronavirus, con todos sus efectos sobre la salud física y psicológica de las personas; junto a la sobrevivencia de las organizaciones y de las economías de los países? Sin duda que los esfuerzos que se están haciendo globalmente son grandes.

Uno de estos, es el trabajar desde casa para evitar exponer a las personas al contagio y permitir que las organizaciones sigan funcionando, en la medida de lo posible. Teletrabajar involucra un cambio muy grande para el cual muchos no estaban lo suficientemente preparados. Hay evidencia de ello en la dificultad de la adaptación, en el aumento del estrés, en el aislamiento, en la alteración en las relaciones familiares y en la presencia de enfermedades osteomusculares.

En estas condiciones, es muy importante la toma de conciencia y el autocuidado personal, y las estrategias de las organizaciones deberían tenerlo entre sus focos de acción, junto a la difusión de estilos de vida y entornos saludables. Trabajar desde la casa tiene ventajas, como más tiempo para compartir con la familia y menos tiempos perdidos en desplazamientos, pero también desventajas, como un mayor aislamiento social, distanciamiento de los compañeros de trabajo, más posibilidades de sedentarismo y de cambios en los hábitos alimenticios; además de una mayor sobrecarga y superposición con las tareas del hogar.

Quizá a algunos les cueste y les lleve un poco más de tiempo adaptarse porque es necesaria una mayor disciplina, autonomía y perseverancia. Puede no ser fácil encontrar cómo responder a las nuevas formas de coordinarse con las demás personas de la organización y cómo funcionar apropiadamente con la tecnología y los nuevos sistemas que comenzarán a aparecer, ya que el trabajo es interdependiente y cada uno es un enlace en la cadena de servicio a los demás.

La organización de un espacio en casa para trabajar apropiadamente, así como la gestión de la propia motivación y del tiempo u horarios son muy importantes, al igual que la realización de actividad física regular, la alimentación balanceada y el respetar horarios de sueño, siendo estos parte del cuidado personal necesario.

En resumen, para la mayoría será algo novedoso que le demandará nuevos ajustes para lograr adaptarse. Hay que enfrentarlo con autocuidado, verlo como un desafío, con motivación y con una actitud abierta a nuevos aprendizajes, siendo más flexibles y tolerantes con uno mismo si cometemos errores o si nos lleva un poco más de tiempo el organizarnos.