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La experiencia de un terremoto y tsunami, como la que
hemos vivido, deja huellas importantes no sólo en nuestras
viviendas, rutas y enseres sino, sobre todo en nuestras
vidas, poniendo a prueba nuestra fortaleza.
La organización y rutina diaria antes tenía un orden, ahora
todo parece alterado, nos cuesta retomar con normalidad
nuestras actividades. Ante esto todos tenemos una forma
muy particular de enfrentar y vivir esta situación.
Las reacciones psicológicas esperables de un ADULTO
después de un desastre natural son:
Reacciones sociales: aislamiento, irritabilidad, conflictos
interpersonales y evitación, además pueden aparecer
síntomas físicos como el insomnio, hiperexcitación, dolor
de cabeza, quejas somáticas, disminución del apetito,
reducción del líbido y disminución de la energía.
A la vez también se pueden presentar reacciones
emocionales tales como estado de shock, inamovilidad,
miedo, ansiedad, desamparo, desesperanza y culpa por
sobrevivir.
Surgen también reacciones cognitivas como la pérdida de
confianza, problemas de memoria, falta en la
concentración, confusión o desorientación y problemas en
la toma de decisiones.
Cabe destacar que las reacciones psicológicas esperables
para NIÑOS Y NIÑAS después de un desastre natural
pueden ser a corto y largo plazo.
Reacciones a corto plazo:
• Los niños presentan características de uno de menor
edad, actuando como en una fase anterior de su
desarrollo: se vuelve a chupar el dedo, habla como
bebé y gatea en vez de caminar, entre otros.
• Se apega físicamente en exceso a sus adultos
significativos
• Se muestra más agresivo(a)
• Disminuye su atención
• Se orina en la cama por la noche
• Llora en forma excesiva
• Se aisla
• Disminuye su conducta de juego
• Se muestra irritable
• Presenta molestias físicas
• Juega expresando vivencias del terremoto
Reacciones a largo plazo:
• Sensación de peligro sin peligro real
• Retrasos en su desarrollo
• Tristeza, irritabilidad, depresión
• Ansiedad
• Miedo ante estímulos que le recuerden la catástrofe,
ruidos y réplicas
• Síndrome de estrés postraumático
Cada persona cuenta con recursos propios para enfrentar
distintas dificultades en la vida, por ello después de un
período de recuperación, la gran mayoría de adultos y niños
no experimentan mayores problemas.