Dra. Roxana Hormazábal: "Este proyecto significa un paso importante para mi carrera como investigadora en educación"

 
 
 
Dra. Roxana Hormazábal 
Facultad Ciencias Humanas de la Universidad Arturo Prat

 
“Para mí este proyecto representa una oportunidad para aportar al campo educativo, especialmente, en lo que significa remirar y ampliar el currículum o la formación docente con temáticas como la muerte que nos posibilitan prepararnos para la vida”

 
En la siguiente entrevista, la Dra. Roxana Hormazábal de la Facultad de Ciencias Humanas de la Universidad Arturo Prat, nos habla sobre su proyecto adjudicado por la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo (ANID) titulado “La muerte como experiencia pedagógica en la infancia. Saberes para la Formación Inicial de Educación Parvularia”.
 
 
¿Con este proyecto que significados se pretenden comprender?

La presente investigación tiene como propósito comprender los significados y saberes que emergen en torno a la experiencia de la muerte desde el mundo de la infancia en contextos educativos.

En el contexto del Fondecyt adjudicado ¿Cuáles son los impactos esperados?

Bueno, se pretende trabajar de manera no adultocentrista en la exploración de saberes que el mundo de los niños y las niñas tiene acerca del tema de la muerte y la vida (Pedagogía de la Muerte) en contextos educativos de la primera infancia. El proyecto plantea trabajar en terreno con la perspectiva de 5 jardines infantiles repartidos en diferentes zonas del territorio nacional para recoger saberes de las niñas, los niños y las educadoras de párvulos respecto de la muerte, el duelo y los diferentes significados que se construyen acerca de la vida. Los resultados de este trabajo de campo terminarán en la elaboración de un marco conceptual sobre la Pedagogía de la Muerte que sea llevado a la Formación Inicial Docente de educación parvularia.
 
¿Cuál es la relevancia práctica y/o científica de la investigación?

Contribuir a la producción de conocimiento educativo respecto de la Pedagogía de la Muerte en nuestro contexto nacional, dado que este fenómeno prácticamente no ha sido estudiado en nuestro país y se perfila como una posibilidad de abrir el campo pedagógico hacia nuevas formas de comprender el desarrollo de la propia vida desde las edades más tempranas. En cuanto a la relevancia científica, el proyecto se desarrollará a través de la indagación narrativa como metodología para comprender y construir saberes para el mundo de la educación inicial desde las voces de sus protagonistas: niños, niñas y educadoras/es, lo que implica también una novedad en el campo científico de la educación.
 
 
¿Cuáles son los resultados esperados de esta investigación?
 
 En Chile, hemos trabajado muy poco en esta materia desde una perspectiva pedagógica y, dadas las necesidades que se van manifestando en la sociedad como la última pandemia, por ejemplo, es fundamental que tengamos herramientas y recursos en los espacios educativos para la comprensión de este fenómeno. Esta investigación será un tiempo de trabajo reflexivo e innovador en nuestra realidad educativa nacional.

 
¿Qué significado tiene para su carrera como investigadora este proyecto?
 
 
Este proyecto significa un paso importante para mi carrera como investigadora en educación, pues, contar con el respaldo de ANID y la UNAP para explorar una temática tan sensible como la muerte y los saberes de la infancia al respecto, es una señal de que necesitamos prestar atención y trabajar seriamente en una educación más integral, más reflexiva y más humana, comenzando por la educación inicial. Sin duda, es un desafío muy grande en lo personal y profesional, pero cuento con un equipo sólido en la carrera de educación parvularia con el que podremos hacer de esto una tarea muy fructífera.