Una de las funciones principales que guardan los partidos políticos, según la tipología más conocida que establece Carl Friedrich, está en el tener un contacto permanente entre los órganos de poder y la población, representar a los distintos grupos sociales e integrar al sistema a muchos grupos sociales, que en otros casos se excluirían a un espacio extra o antisistema.

Son estas funciones, las que a 10 días de la segunda vuelta presidencial, le exigimos a los dos candidatos en competencia.

La sociedad chilena, hoy a dado pruebas claras de desarraigo político, evidenciando una baja participación electoral y precisamente en las últimas elecciones, el deseo de ser representados por nuevas fuerzas, que aparentemente recogen las funciones que describe Carl Friedrich.

La señal dada ayer por la Comisión de Educación del Senado, quien unánimemente aprobó la idea de legislar el proyecto de Educación Superior, que busca definir la gratuidad, tanto en el sistema universitario como en el sistema técnico-profesional y que permitirá votarse durante la próxima semana en el pleno de la Cámara Alta, esperamos pueda representar una señal de esperanza y que comience nuevamente a primar en la sociedad, el sentido común por el individual.

El triunfo de ayer, va más allá de la votación alcanzada en este proyecto, ya que más bien representa la presión que ejerce la ciudadanía, por lograr derechos sociales básicos y donde en esta ocasión, los políticos debieron "cuadrarse" con sus electores.

Esperamos que esta senda continúe y que la presión ejercida por miles de familias por cambiar las actuales condiciones de la educación en Chile, cambie.

También esperamos que todos los compromisos suscritos por los dos candidatos en competencia, al momento de iniciar su gobierno, sean respetados, iniciando un periodo presidencial de cara al país y cuyo centro esté en representar los intereses ciudadanos, que valida y esforzadamente pudieron desde el 2010 y a través de distintas acciones, imponer el deseo de cambios, en una educación que requería con urgencia de cambios profundos.