Nuevos egresados se titulan en la Universidad Arturo Prat Sede Victoria

Llegando al final de un largo camino formador, esta semana cerca de 45 estudiantes de la carrera de Enfermería de la Universidad Arturo Prat Sede Victoria rindieron su tan esperado examen de título, coronando con ello cinco años de enseñanza llenos de aciertos, errores, sacrificios y de mucho conocimiento, todo con el fin de realizarse exitosamente en el mundo laboral.

Programados del 6 al 14 de enero, los exámenes de título de Enfermería estuvieron divididos según las áreas de especialidad escogidas por los universitarios: Pediatría, Comunitaria y Médico Quirúrgico, en donde cada estudiante se presentó de manera individual frente a una comisión con el propósito de abordar un caso al azar según el llamado Proceso de Atención de Enfermería (PAE), entendido como el método sistemático y organizado para administrar cuidados individualizados.

De acuerdo con Paola Pérez, Docente y Presidenta de la Comisión del área Médico Quirúrgico, el total de personas presentes para dar el examen resultó relevante, considerando que "en la región hay otras cuatro Casas de Estudios que imparten la carrera. Es un gran número tomando en cuenta el campo profesional en la actualidad, pero creo que cada Universidad tiene que darle un plus propio a sus universitarios. Generalmente nuestros estudiantes se quedan trabajando en los mismos lugares donde se han desempeñado, por eso hemos tenido buenos resultados y confiamos en nuestra formación y en nuestros alumnos", indicó la Académica.

"El examen es una situación muy estresante", comentó el ahora ex estudiante titulado, Hugo Mora. "Cuando uno termina su internado, te dan cerca de un mes para que uno pueda organizarse y estudiar toda la materia que podría salir en un examen de título, ya que hay más de cien casos, con distintas enfermedades, y uno tiene que estar preparado para cualquiera", junto con asegurar que la sensación de haber aprobado "es algo inexplicable, es una felicidad inmensa. Muy agradecido de Dios, ya que es la finalización de un proceso de cinco años que se ve muy lejano, pero en donde el tiempo pasa muy rápido y ya se puede decir que es una meta cumplida y una gran satisfacción para uno y para la familia", señaló el joven oriundo de Angol.
"Cuando se ingresa a la carrera, uno ve la meta muy lejos, pero a medida que uno va cursando los años, se va enamorando de la profesión, le va gustando, y los años se van pasando rápido y no te das cuenta cuando ya vas en las últimas etapas. Es muy grato aprender y saber a lo que uno se va a dedicar por el resto de la vida. Es un carrera sacrificada, no es fácil, pero gracias a Dios se puede", destacó el ahora Enfermero titulado de la Universidad Arturo Prat Sede Victoria.