Revitalizar el paradigma que establece que en Taltal se ubican los auténticos descendientes de los antiguos "Changos" o "Camanchacos", fijando así a esta comuna de la Segunda Región, como un Área de Desarrollo Indígena (ADI), es la tarea en que está el municipio de la localidad, apoyados por investigadores de la Facultad de Recursos Naturales Renovables de la Universidad Arturo Prat (UNAP).

La iniciativa, impulsada por el alcalde de Taltal; Sergio Orellana Montejo y que partió en mayo pasado, busca demostrar en un espacio cercano a los 150 kilómetros, en específico entre las localidades de Paposo y Caleta Cifuncho, la convergencia arqueológica, etnohistórica, histórica y antropológica, con la tradición de los changos y los habitantes que residen hoy en este espacio costero.

Según el investigador de la UNAP, doctor Álvaro Carevic Rivera, quien lidera esta iniciativa, existe elementos más que comprobados de la adscripción cultural de los changos, establecidos a través de antecedentes, como es el arte rupestre, los relatos etnohistóricos, formas de vida y técnicas de pesca y recolección de mariscos, heredados de aquellos habitantes que poblaron este territorio desde hace dos mil años.

La preservación de pictografías, que sucumben ante el poco respeto humano, es una de las tareas que busca desarrollar el proyecto.

Indicó que si bien se perdió el lingüismo, existen varios sitios arqueológicos que establecen el asentamiento de changos vernaculares, dentro de los que se cuentan los sitios de Morro Colorado, Agua Dulce y Zapatero, que alcanzan evidencia como conchales y pictografías, que desafortunadamente han experimentado el descuido y daño que genera la propia población.

Álvaro Carevic, establece que el proyecto busca caracterizar y generar una línea base para declarar como Área de Desarrollo Indígena, la Planicie Litoral y Cordillera de la Costa a la zona de Taltal como etnia changa o camanchacos.

Permitiendo así conservar y poner en valor el patrimonio chango, además de preservar la herencia en técnicas de pesca y recolección de mariscos de sus pobladores, que a través de entrevistas a pobladores con una edad promedio de 70, reconocen haber aprendido de sus antepasados los métodos de subsistencia.

Álvaro Carevic, director del proyecto, indicó que se busca conservar y poner en valor el patrimonio chango en Taltal.

Indicó, que al igual que pueblos como los diaguitas, que por múltiples factores no heredaron su lengua, pero si lazos de identidad cultural, el alcanzar un reconocimiento como un Área de Desarrollo Indígena (ADI) de parte de la Conadi, permitirá que los taltalinos puedan acceder a recursos que les permita preservar su costumbres y formas de pesca, manteniendo así aquellas costumbres milenarias.

Sergio Orellana Montejo, alcalde de Taltal indicó que este trabajo se enmarca dentro de un convenio que tiene con la Universidad Arturo Prat y que pretende a través de líneas de investigación, ligadas a la meteorología, arqueología, agricultura y biología, fortalecer el desarrollo de la comuna, visualizando áreas que preserven el territorio y que además permitan definan nuevas áreas de trabajo, en torno a la identidad costera.

Indicó que a diferencia de otros tiempos, existe dentro del poblado una resignificación de lo que significa ser "chango", por lo que esta identidad debe fortalecerse, en especial con las nuevas generaciones.

Así, el alcalde estimó que a través de la gestión realizada con las autoridades regionales, se busca establecer a esta zona como una ADI, que permita resurgir la actividad pesquera, acompañándola con el turismo, frenando además el deterioro de aquellos espacios que registran los vestigios de esta población que habitó gran parte de la costa nortina.