Egresados de Unap Antofagasta participan en taller sobre inteligencia emocional en el mundo laboral

Con más de 50 asistentes se realizó el taller "Inteligencia Emocional para el Trabajo", encabezado por la coach de vida, Alejandra Leiva, quien instruyó a estudiantes de los últimos años, egresados y titulados del Centro Docente y de Vinculación de la Universidad Arturo Prat de Antofagasta en cuanto al reconocimiento y manejo de las emociones en el mundo laboral.

La actividad tuvo un sentido práctico en su mayoría y se enfocó en mostrar las herramientas que se requieren para el mundo laboral, enlazadas a la inteligencia emocional y su respectivo manejo. "Uno de los asuntos centrales del taller fue que, a través de distintas técnicas, se pueden activar los recursos internos de las personas; de su auto confianza y seguridad para mejorar la autoestima y tener buenos resultados al momento de ingresar a un trabajo. Hablamos de la pasión del trabajo, de enamorarse del quehacer profesional para que todo fluya, no sólo reaccionar y responder", resumió la coaching.

El taller también abordó aspectos ligados a manejar los impulsos en el trabajo, para así no afectar el quehacer profesional y terminar reaccionando por una carga emocional, ligada al pasado probablemente. Por lo que lo ideal -de acuerdo a la expositora- es mantener la calma frente a situaciones que el cerebro pueda percibir como una amenaza y entender que no necesariamente son asuntos dañinos o personales.

-¿Qué importancia tiene para las personas conocer sus emociones en el plano laboral?
-Súper importante, porque a veces las personas en el trabajo entran súper motivadas, tienen expectativas, están ansiosos por ingresar a un trabajo. Ellos ponen sus recursos internos a disposición y esperan una contribución de reconocimiento más allá del tema económico.
-¿Por qué?
-Porque por cualquier eventualidad del trabajo, o un estrés, se desbordan. Si no tienen esa inteligencia emocinal es probalbe que esa motivacion decaiga y las personas se estresen y depriman, y en consecuencia no quieran estar más en el trabajo. Por eso es crucial administrar esas emociones, tener esa capacidad de reconocer e indentificar lo que les está haciendo daño, que a veces es algo que está en tu cabeza más que algo que forme parte de la realidad. Es entender que no hay que tomarse las cosas tan personalmente. Las cosas ocurren para crecer como persona, no necesariamente significan algo en contra tuya.
-¿Qué se debe controlar en el plano laboral en cuanto a emociones? Podría dar un ejemplo.
-Un ejemplo es que no se tiene que controlar nada. Controlar es contraproducente: a lo que te resistes, persiste, es una ley. Si te digo que no pienses en un perro con labios pintados, es lo primero que haces. ¿Cuál es la sugerencia? Debes identificar lo que está pasando a tu alrededor, estar más consciente y menos dormido, entender las señales y los mensajes para que no te afecten, y la clave del taller y del coach son las preguntas. Cuando te preguntas si es real esto que me pasa, ¿me están atacando? Cuando te cuestionas la ansiedad baja y ese deseo compulsivo baja también de intensidad, porque cuestionas algo que no es la realidad; lo que más te hace daño son los mismos efectos especiales que le pones a tus pensamientos.
-¿Podría entregar algunas técnicas al respecto?
-El auto conocimiento, manejar tus emociones, estar tiempo a solas, ir a la playa, buscar momentos que te inspiren y te hagan reconocer que hay personas que te vienen a enseñar algo y no a hacerte daño.