Al menos cincuenta estudiantes se reunieron el 1 de junio en el salón Oscar Hahn para participar de la Jornada informativa de Higiene Vocal para Docentes, organizada por el Centro de Alumnos de Pedagogía de Matemáticas y Física de la Facultad de Ciencias Humanas de la Universidad Arturo Prat (UNAP), y el apoyo de la Unidad de Cuidados de la Voz de la carrera de Fonoaudiología de esta casa de estudios.

En representación de los estudiantes, Cristina Müller (en la imagen, de pié, a la izquierda), comentó que la iniciativa surgió porque "notamos que hay muchos temas como docentes que no hemos tocado dentro de la carrera. Uno de ellos es el manejo de la voz, donde sufrimos mucho y necesitamos aprender a manejarlo. Organizamos la actividad como Centro de Alumnos, y nos interesa cómo prevenir las enfermedades y cómo cuidarse dentro del aula, teniendo en cuenta la voz como herramienta de trabajo".

Milka Parra, encargada de la Unidad de Cuidados de la Voz (en la foto, de pié, a la derecha), aportó que "en la docencia es muy frecuente que los profesores tengan patologías vocales, como nódulos y pólipos, donde se hace un uso y abuso de la voz por mucho tiempo. El síntoma principal es la disfonía o ronquera y les falta aire cuando están hablando, y se cansan. Fuerzan la intensidad de la voz para que los puedan escuchar".

Desde su perspectiva, "cada carrera de pedagogía debiera tener en su actividad curricular un espacio que considere la voz como herramienta de trabajo, y ojalá haya dos semestres con un fonoaudiólogo. El pólipo se desarrolla en un año. La prevención es importante; a las personas que están conscientes que van a usar su voz más de lo normal, se les de la estrategia y la técnica para que los escuchen sin llegar al grito".

RECOMENDACIONES

Para los profesores, se recomienda:

De izquierda a derecha, los estudiantes de 5º Año en práctica en la Unidad de Cuidados de la Voz de la carrera de Fonoaudiología, Andrea Castillo, Gisselle Vallejos, la fonoaudióloga Milka Parra, y Mario Valenzuela.

Evitar tomar bebidas muy calientes o frías antes de dar una clase, ya que éstas actúan como vasoconstrictor o vasodilatador.

Mantener una postura corporal adecuada al momento de dirigirse a los estudiantes.

Tratar de no hablar mientras escribe en la pizarra. El sonido pierde intensidad e involuntariamente se eleva el volumen de la voz, produciendo cansancio vocal.

Distribuir a los estudiantes en la sala de clases, con el propósito de beneficiar su proyección vocal.

Cuando le esté hablando a un alumno, y éste no le escuche, no esfuerce su voz, sino que diríjase hacia él.

Si habla en lugares abiertos (patio, gimnasio, etc.) utilice silbato o algún tipo de amplificación.

No utilice su voz para llamar la atención de sus alumnos.

Utilice la regla de hablar una hora y descansar quince minutos, para evitar la fatiga.

Centro de Atención Fonoaudiológica: Fono 526897